Una de las preocupaciones a las que nos enfrentamos a diario en nuestras tareas domésticas, no es solo con el mantenimiento de nuestra casa, sino también con la limpieza de todo el mobiliario y decoración, lo que, por supuesto, también implica la limpieza de alfombras.
Generalmente utilizamos productos específicos para diferentes tipos de limpieza y superficies. En el caso de las alfombras, disponemos de productos especialmente desarrollados para la limpieza de estos accesorios en tela y otro tipo de fibras.
Como alternativa a estos productos específicos de limpieza de alfombras, también puedes utilizar el producto con el que limpias la tapicería de tu coche o la tapicería de tu sofá.
Cómo limpiar alfombras
Uno de los pasos más importantes para limpiar alfombras con éxito es la rapidez con que lo hace. Es decir, tan pronto como se encuentre con algo derramado sobre la alfombra, debe comenzar a ocuparse del asunto de inmediato.
Limpiar primero con toallitas, como Dodot, para eliminar el exceso e incluso atenuar los olores, además de hacer una primera limpieza. Si no es una mancha o una mancha antigua, el conocido Karpex puede dar buenos resultados.
Como regla general, el fabricante de este producto recomienda mezclar tres cápsulas del producto diluido en medio litro de agua. Luego, frote con un cepillo suave, por ejemplo un cepillo para limpiar la ropa, en la zona afectada o sucia y déjela secar durante unas dos horas. Después de secar, aspire esa área y su alfombra estará limpia. Recuerda que no necesitarás enjuagar la alfombra ni la zona tratada.
La limpieza de alfombras, aunque es una tarea relativamente fácil, requiere cierto cuidado. Regularmente lo que hacemos es aspirar y quitar el polvo, pero a veces queda más suciedad incrustada en las fibras, sin que nos demos cuenta.
Siga nuestra siguiente sugerencia para acabar con este problema:
- Sobre la alfombra a limpiar, esparcir un poco de bicarbonato de sodio o, en su defecto, harina de maíz (harina de maíz).
- Déjalo durante aproximadamente media hora y luego puedes aspirar.
- Si sientes que no has eliminado toda la suciedad, puedes repetir el proceso, porque tanto el bicarbonato de sodio como la harina tienen la capacidad de absorber más suciedad y polvo arraigados.
Opciones de limpieza de alfombras caseras
Si eres de esas personas que apuestan por las opciones caseras y más respetuosas con el medio ambiente para la limpieza de tu hogar, nuestra siguiente sugerencia se presenta como una solución muy económica.
- Toma un repollo verde y córtalo por la mitad.
- Repase la alfombra y déjela actuar durante unos quince minutos.
- Luego, simplemente aspire.
- Si hay manchas o manchas, frota la col con insistencia y fuerza y repite tantas veces como sea necesario para que la mancha desaparezca.
El siguiente consejo es ideal para fumadores con alfombras en casa y aquellos que han tenido accidentes menores.
- Coloque una cebolla triturada en un recipiente y agregue talco en polvo y vinagre blanco
- mezclar todo muy bien hasta que tenga una consistencia pastosa.
- Luego coloca esta mezcla sobre la zona quemada y déjala secar.
- Una vez seco, aspire el área, pero suavemente. La zona quemada queda más borrosa, sin necesidad de reponer la alfombra.