Mucha gente siente que no existe una gran ciencia ni un cuidado especial cuando se trata de tener pescado en casa.
A la hora de decidir apostar por la androfilia debes, de hecho, tener en cuenta y como primera preocupación el lugar donde colocarás los peces, es decir, el acuario.
Elección del acuario
Como se sabe, existen diferentes tipos, formas y tamaños. Pero la principal diferencia a la hora de elegir un acuario es si es agua fría o agua caliente, siempre según las necesidades y tipos de peces que quieras adquirir.
La mejor y más comprada forma de acuarios de agua caliente es en forma de paralelepípedo ya que permite mejores condiciones de limpieza, mantenimiento de la calidad del agua y proporciona una mayor base de apoyo con el ambiente exterior.
Limpieza de acuarios de agua caliente
En cualquier caso, antes de iniciar el montaje del futuro hábitat de tus peces, debes lavar bien el acuario con agua caliente, sin utilizar ningún tipo de detergente ni producto tóxico.
Primero se debe colocar la arena en el fondo del acuario, que será el factor de éxito en el buen mantenimiento de peces y plantas. A continuación, puede colocar los elementos decorativos, que también se lavan bien solo con agua caliente. Solo en este punto se deben instalar el filtro de agua y el calentador. El agua, que es un elemento vital para los peces, debe estar bien preparada antes de introducirla en el acuario. El agua del grifo típica contiene varios elementos como el cloro que son altamente nocivos para los peces, por lo que lo mejor es optar por productos a la venta en ubicaciones especializadas, de modo que se puedan neutralizar los elementos nocivos para los peces.
Recuerda que nunca debes limpiar el acuario sin antes apagar el calentador, porque cuando llega el momento de volver a poner el agua, puedes correr el riesgo de que se caliente y explote porque está encendido y no está cubierto de agua.
Filtro de acuario transparente
En cuanto al filtro, se ocupa de la desintegración de sustancias nocivas resultantes de restos de comida, hojas muertas y excrementos de pescado. Para limpiarlo será necesario lavarlo con agua caliente y planchar con una esponja cuyo uso es solo este y nunca para vajilla.
Un acuario debidamente tratado nunca debe lavarse por completo, y lo máximo que se debe hacer, semanalmente, es cambiar una cuarta parte del agua del acuario, agregando agua nueva, a la misma temperatura y con los mismos parámetros que el agua del acuario.
Al limpiar la arena (fondo), se debe usar una aspiradora. Sin embargo, el vidrio del acuario se puede limpiar con un raspador magnético o incluso a mano.
Limpiar el cristal del acuario
Los vasos, por otro lado, deben limpiarse cada dos semanas y utilizando el agua del acuario.
Antes de volver a introducir los peces en el acuario, espere de 20 a 30 minutos para permitir un aire acondicionado más rápido. De todos modos, no pretendemos generalizar el tipo de limpieza de un acuario, pues las opciones indicadas para algunos tipos de peces, pueden no ser las mejores para otros.