A lo largo de los años y la evolución de la ingeniería los motores han evolucionado de forma gigantesca, con el fin de obtener mejores prestaciones y consumir el menor combustible posible. Como tal, el sistema de refrigeración de estos motores también ha evolucionado para poder seguir el ritmo del desarrollo de los motores.
Limpieza del sistema de enfriamiento del motor
Un motor (de automóvil) puede alcanzar casi 2.800 ° C de temperatura con su potencia, lo que haría que todo el material del motor se derrita rápidamente. El sistema de refrigeración evita que esto suceda, pero bajar temperaturas de este tamaño no es fácil y, como tal, este es uno de los sistemas más afectados por el entorno circundante y las horas de trabajo que realiza el motor.
En un automóvil (el sistema de enfriamiento elegido) hay dos tipos de sistemas de enfriamiento: aire y agua. La mayoría de los automóviles tienen un sistema de refrigeración por agua, por lo que cubriremos ese sistema en detalle.
Nota: Los sistemas de refrigeración difieren de una marca a otra y de un modelo a otro, por lo que explicaremos cómo hacer esta limpieza en un sistema genérico.
Cómo funciona el sistema de enfriamiento
En un sistema de enfriamiento, el líquido es bombeado por el motor impulsado por la bomba de agua que circula a través de las mangueras del motor hasta que la temperatura del motor es ideal para la operación. En este punto, el termostato se abre, permitiendo que pase el refrigerante y permitiendo que el agua circule por el motor y el radiador. La temperatura desciende cuando pasa por el radiador y también por la acción del ventilador y el aire exterior. Después de eso, se reinicia el ciclo.
El sobrecalentamiento del motor con el tiempo provoca daños en el motor debido a la alta temperatura. Por este motivo, la limpieza y mantenimiento del sistema debe realizarse una vez al año o cada 30.000 kilómetros.
Cómo limpiar el sistema de enfriamiento
- Inicialmente, desconecte la manguera inferior del radiador, el motor está muy frío y retire todo el líquido a través de la manguera inferior.
- Tan pronto como termine, agregue agua al tanque y a ambas mangueras.
- En el lado izquierdo del motor hay un sensor de ventilador. Debe estar apagado.
- Vuelva a poner agua en el tanque o en las mangueras hasta que se desborde un poco a través del sensor del ventilador.
- Vuelva a conectar el sensor y espere a que salga toda el agua.
- Debes agregar agua nuevamente hasta que salga transparente.
- Cuando el agua esté limpia, retire el tanque de agua y lávelo con jabón.
- Con el tanque apagado y las mangueras desconectadas, verifique que no estén cortadas o dañadas. También debe verificar que los tornillos y accesorios estén en buenas condiciones y libres de óxido.
- Terminado esto, coloque el tanque y vuelva a armar todo. Debe desconectar el sensor del ventilador nuevamente para eliminar el aire.
- Llene el tanque con agua y el aditivo, en cantidades iguales, hasta que rebose por el sensor del ventilador.
- Arranque el automóvil, acelerando, con el tanque abierto, pero solo después de encender el sensor del ventilador. Deja salir todo el aire.
- Apague el coche, deje que el motor se enfríe y vuelva a llenar el depósito.
- Cierre el tanque y acelere ligeramente hasta que se active el ventilador.
- Apague el coche y déjelo enfriar. Abra el tanque, verifique su nivel y, si está en el nivel deseado, ya está.
Tenga cuidado de manipular el motor sin esperar a que se enfríe.